El verano también es un tiempo para aprender y por eso a nadie se le escapa la importancia que tiene, en la educación de los hijos, la convivencia con sus amigos y compañeros. Así, y de manera divertida, aprenden a respetar las opiniones ajenas, a luchar para ser ordenados, sinceros, honestos, puntuales, limpios, etc., y muchas otras virtudes, tan importantes en su desarrollo como lo son las asignaturas a lo largo del curso académico.
El tiempo libre del verano es el momento adecuado para educar en estas áreas. En Bell-lloc cuidamos que el ambiente acompañe, creando un clima cristiano de confianza, de solidaridad y de alegría, en el que los asistentes aprendan a mejorar como personas, pasándoselo en grande. Para alcanzar estos objetivos, y con el apoyo de los Clubes Tempir y Tramuntana, hemos organizado esta estancia de 7 días en Quintanes, una finca rodeada de 250 hectáreas de bosques y prados, presidida por una casa de payés del siglo XVIII en Les Masies de Voltregà.
Durante estos días realizaremos todo tipo de actividades: las mañanas las dedicaremos a la competición multideportiva, que finalizará con un buen rato en la piscina. Después de comer, se organizarán actividades y talleres que favorezcan la digestión, como los juegos de mesa, lectura o deberes de verano, manualidades, etc. El resto de la tarde haremos juegos diversos, como gymkhanas, orienting, búsquedas del tesoro, etc., y antes de dar por finalizada la jornada haremos los juegos de noche, tan esperados por los chicos. Cada pocas jornadas romperemos este ritmo habitual para salir de excursión: al pantano de Sau a hacer kayaks, a Arbúcies a hacer un circuito aéreo por los bosques del Coll de Revell y al riachuelo del Merlés para descubrir la fauna y la flora del entorno.
